Favorito de Camila
En la columna de esta semana, Vanessa nos contó que fue víctima de violencia digital. Con tan solo 12 años de edad tuvo que enfrentar que un video íntimo suyo se regara por todo su colegio. Valientemente nos compartió lo que le sucedió, cómo fue juzgada, cómo marcó su vida y cómo, por primera vez, pudo contar su historia sin sentir vergüenza de ella.
Teniendo en cuenta esto, los invito a ver el documental de Netflix: Audrie & Daisy. Allí conocerán historias que les permitirán generar conciencia alrededor de casos de abuso sexual y de violencia digital. Éste último fue uno de los temas que presentamos en las Propuestas en temas de erradicación de la violencia, acceso a la justicia y salud para las mujeres al Congreso de la República.
Este recomendado cuenta, entre otras, la historia de Audrie Pott, una joven de 15 años que fue abusada sexualmente por un grupo de jóvenes, quiénes también rayaron su cuerpo desnudo con mensajes obscenos y tomaron fotos para enviarlas a compañeros del colegio. Audrie se suicidó una semana después de los hechos.
También vemos la historia de Daisy Coleman, contada por ella misma, donde relata que tras estar inconsciente después de consumir alcohol fue violada en la casa de un amigo por un amigo de su hermano. Esta violación fue grabada y publicada. Tal y como le pasó a Vanessa, la mala del paseo fue Daisy. Tanto ella, como su familia recibieron amenazas y todo tipo de ofensas y ella siempre fue tildada de mentirosa. Fueron tales los agravios que la familia tuvo que trasladarse a otra ciudad.
Este documental es una muestra más del sistema patriarcal en el que vivimos. Una sociedad que siempre culpabiliza a la mujer y muy pocas veces al hombre. Una vez más vemos que con este tipo de casos, la sociedad asume que la mujer tuvo que hacer algo para que eso le pasara. ¿Para qué grabó el video?, ¿Para qué se tomó la foto?, ¿Por qué se emborrachó?, ¿Por qué se vistió sexy?, ¿Por qué se quedó a dormir allá?, etc. Es momento que tomemos conciencia y reflexionemos frente a cómo hemos contribuido a la cultura de la violación.
SietePolas 
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